Mamá, gracias por tu amor incondicional, por tus palabras de fe y esperanza, por tus brazos, tu ternura y persistencia cuando más te he necesitado. Gracias por sostenerme de tu mano con tus oraciones, por tu compañía y cada momento que compartimos, por nuestras conversaciones todos los días, por nuestro café y visita al santísimo y a aquellas personas de fe que te rodean, gracias por ser mi mamá, que Dios te conceda mucha salud y años de vida porque eres mi soporte y faro, eres ejemplo y testimonio del amor de Dios y Te amo. Tu hija Liliana
La tarjeta que acabas de ver puede ser tuya
Descarga este video a tu dispositivo para tenerlo siempre a mano y enviarlo como quieras ilimitadamente, sin necesidad de navegar por CorreoMagico.com por $1,80.