Apreciada prima, gracias por estar siempre dispuesta a escuchar mis lamentos y la de mi hijo, te queremos y compartimos estos momentos contigo... Dios te conceda salud en tu vida.
La tarjeta que acabas de ver puede ser tuya
Descarga este video a tu dispositivo para tenerlo siempre a mano y enviarlo como quieras ilimitadamente, sin necesidad de navegar por CorreoMagico.com por $1,80.